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jueves, 31 de enero de 2013

El Deber se hace eco del plensamiento de Vacaflor. Bolivia no quiere ofrecer garantías a los inversionistas. el derecho jurídico de las empresas no está garantizado y el Gobierno pretende "emborrachar la perdiz" cuando propone "una ley de inversionistas sin garantías para el capital.


Bolivia se sumó en Santiago de Chile, durante la reunión Celac-UE, al grupo de países que se niega a dar seguridades jurídicas a las inversiones extranjeras. Los otros países que estuvieron en esa postura son Cuba, Nicaragua, Venezuela, Ecuador y Argentina. Los demás países de la región parecieron haber entendido que estaban asistiendo a una reunión muy importante, en que los europeos, con sus economías sumidas en graves dificultades, estaban buscando plazas nuevas para emigrar sus capitales.

Cientos de empresas europeas, así como ciudadanos de ese continente, han cruzado el océano para llegar a América Latina conforme se acrecentaba la crisis que pone en duda el futuro del euro. Brasil es el primer país beneficiado con este éxodo económico. Pero por alguna extraña razón, el mencionado grupo de países, al que se sumó Bolivia, decidió cerrar sus puertas a las inversiones que lleguen del exterior, pues niegan las seguridades jurídicas que todo inversionista reclama. El argumento esgrimido por la presidenta de Argentina, Cristina Fernández, fue que las garantías y seguridades jurídicas no pueden estar por encima de las conveniencias circunstanciales de las políticas económicas de los gobiernos.

Los presidentes y jefes de Gobierno de Europa habían entendido que las seguridades jurídicas pertenecen a políticas de Estado y no a decisiones de Gobierno, que siempre son circunstanciales y pasajeras. Para los europeos, y para todos los inversionistas del mundo, el panorama es claro: hay en América latina países donde se puede invertir porque allí existen seguridades jurídicas, y hay otros donde no es conveniente hacerlo, porque no existen esas seguridades. 

En este último grupo está Bolivia. Los países que conforman el grupo de los que se niegan a dar seguridades jurídicas figuran en las estadísticas internacionales como los que en peores condiciones están. Son los países que, casualmente, también ponen muchas trabas a las inversiones internas. La cantidad de condiciones que ponen para la creación de empresas son proporcionales a la incertidumbre en que las ya establecidas deben operar.
Mientras este proceso sigue adelante, los países donde existen seguridades jurídicas para las inversiones son los que más progresan, mientras los otros siguen marcando los lugares más rezagados. Esta clase de afiliaciones deberían ser motivo de un referéndum, y no resultado de la decisión de gobiernos pasajeros

miércoles, 30 de enero de 2013

se explica uno porqué Evo se resistió a firmar el documento que acuerda a nivel global "seguridad jurídica" a las inversiones. es que no las quieren. prefieren seguir nacionalizando como en Argentina, como en Venezuela, como en Cuba...escapan de la norma y quieren "libertad de inversión" resultado será que las empresas no vendrán al país. H.VaCAFLOR

Evo Morales lo ratificó en Santiago de Chile: en Bolivia no hay seguridades jurídicas para las inversiones privadas. Y no las habrá.

El borrador del documento que debían firmar los presidentes y jefes de estado de la CELAC y la Unión Europea decía: “proporcionar seguridad jurídica a los operadores económicos”.

Pero la presidente de Argentina, Cristina Kirchner, obtuvo el apoyo de las delegaciones de Bolivia, Cuba, Ecuador y Venezuela para que se reconozca: “el derecho de los países de establecer regulaciones para cumplir sus objetivos políticos”.

Es decir que los gobiernos de esos países se reservan el derecho de violar las condiciones legales para las inversiones privadas cuando tengan objetivos políticos para hacerlo.

Los gobiernos militares del pasado solían hacer aclaraciones parecidas a la que plantearon los gobiernos del ALBA en Santiago: decían que las constituciones quedaban en vigencia, salvo en los puntos que contradigan los propósitos de la “revolución” del momento.

En Bolivia la situación de inseguridad jurídica para las operaciones económicas no necesitaba de aquella declaración de Santiago.

Por necesidades electorales, a veces, y otras por urgencias de cumplir rituales, como el 1 de mayo, se “nacionalizaban” empresas.

Lo que ocurra luego con esas empresas no importa. El año pasado se “nacionalizó” Colquiri y los trabajadores de esa mina volvieron a protestar esta semana exigiendo que el gobierno garantice una buena gestión.
Este caso llevó al presidente a decir que “si nacionalizamos para producir menos, ¿para que vamos a nacionalizar?”

Las otras empresas “nacionalizadas” tampoco están muy bien que digamos. Si sus trabajadores tuvieran que marchar protestando, como lo están haciendo los de Colquiri, serían multitud, pues la única decisión que tomó el gobierno en todas ellas fue para llenarlas de supernumerarios.

Lo que no sabían en Santiago es que desde hace siete años el gobierno de Morales no elabora la nueva ley de inversiones. Es decir que no es necesario hacer aquella aclaración en el texto de la declaración, porque aquí, directamente, no hay seguridades jurídicas. Y punto.
Vacaflor.obolog.com

domingo, 27 de enero de 2013

cómo no aprovechar la sabiduría de Carlos Mesa cuando nos ofrece una lectura histórica de los resultados del último censo y aprehender de sus conclusiones para el presente y el futuro


Bolivia ha llevado a cabo muy pocos censos nacionales a lo largo de su historia (quizás sea el país sudamericano que menos ha hecho), apenas 10 en 188 años si incluimos el estudio de Dalence de 1845. En ese tiempo hemos multiplicado por 10 nuestra población, de 1,01 millones a 10,4 millones. En el censo de 1831 se consideraban seis departamentos, el territorio de Mojos y una provincia con estatus especial, el Litoral. El Beni apareció por primera vez como departamento en el cálculo de Dalence de 1845, y el Litoral fue considerado como propio hasta el censo de 1900. Tenía en 1831, 3.800 habitantes y en 1900, cuando ya estaba en poder de Chile, 49.800 pobladores. Pando fue considerado Territorio de Colonias, apareció consignado por primera vez en 1854 con una población de 4.400 habitantes; el primer censo que consideró a Pando como departamento fue el de 1950 con un registro de 19.800 habitantes.
En 1831, el departamento de La Paz representaba el 34 por ciento de la población del país (hoy representa el 26 por ciento), seguido por Cochabamba que tenía el 22 por ciento. En el otro extremo (descontando el Litoral), estaban Mojos con el 0,8 por ciento de los habitantes y Tarija con el 1,8 por ciento.
En general se cree que La Paz comenzó a ser importante demográficamente a partir de comienzos del siglo XX, lo que es incorrecto. El departamento de La Paz se convirtió en el más poblado y en consecuencia más relevante económica y políticamente, en la colonia, desde la segunda mitad del siglo XVIII, y fue el departamento con más habitantes del país desde 1825 hasta 2012, a lo largo de todo el periodo republicano. El actual censo es el primero de nuestra historia en que La Paz deja de ser el primero de Bolivia superado por Santa Cruz. La diferencia es todavía insignificante, algo más de 34.000 habitantes, pero la tendencia demográfica es clara. El índice actual de crecimiento de Santa Cruz es 37 por ciento, mientras el de La Paz es de 17 por ciento, más del doble. A la vuelta de un quinquenio esa diferencia se hará mucho más marcada.
El caso de Santa Cruz es realmente extraordinario. La Paz pasó de 343.000 habitantes en 1831 a 2.741.000 en 2012, esto quiere decir que multiplicó su tamaño ocho veces en algo más de 180 años. Santa Cruz, en cambio, pasó de 41.000 habitantes en 1831 a 2.776.000 en 2012, multiplicó su tamaño ¡78 veces! en ese mismo periodo. Lo interesante es que mientras La Paz tuvo un crecimiento sostenido pero “moderado” en el periodo 1831-1900 e intenso entre 1900 y 1976, Santa Cruz mantuvo un crecimiento moderado hasta 1950 y geométrico desde ese año hasta 2012. En 1950 contaba con 286.000 habitantes, lo que quiere decir que creció 10 veces en 60 años, mientras La Paz en ese mismo lapso creció sólo tres veces.
En 1831 vivían por encima de los 2.000 metros de altitud el 92 por ciento de los habitantes del país. En 2012 ese porcentaje cayó al 63 por ciento, lo que marca un importantísimo proceso de migración. No se trató de una migración espontánea, sino que fue producto de políticas explícitas de Estado acompañadas de inversiones concretas en infraestructura, diversificación económica y desarrollo industrial, impulsadas desde 1942 y que se reflejan claramente a partir del censo de 1976.
La concentración de población en el llamado eje troncal hace que en 2012 el 72 por ciento de la población esté en tres departamentos: La Paz, Cochabamba y Santa Cruz, generando un eje oeste-este. Esa concentración se daba en 1831 en los departamentos de La Paz, Cochabamba y Potosí, que sumaban casi exactamente la proporción actual, el 75 por ciento del total de la población del país en un eje norte-sur geográficamente mucho menos extenso que el actual eje central, y restringido a la región andina, a diferencia de la distribución geográfica Andes-llanos de hoy.
La faja norte, Pando-Beni, representaba en 1831 menos del 1 por ciento de la población, hoy representa el 5 por ciento. Eso quiere decir que sigue siendo una región del país en la que no hay una planificación de desarrollo y diversificación equivalente a la que se tuvo para Santa Cruz. Algo similar pasa con Tarija que en 1831 tenía algo menos del 2 por ciento y hoy representa sólo un 5 por ciento, aunque tiene casi la totalidad de las riquezas energéticas de Bolivia.
Finalmente, vale la pena citar los casos de Oruro, Potosí y Chuquisaca. Mientras estos dos últimos departamentos registran crecimientos demográficos muy bajos ratificando la idea de los limitados horizontes económicos de ambas regiones desde el censo de 1976, Oruro, contra toda previsión, marca un crecimiento del 25 por ciento, recordando la gran expectativa que se tuvo a principios del siglo XX cuando se pensó que sería la ciudad industrial y nudo de comunicaciones del país. El puerto seco y sobre todo la febril actividad en la ruta Pisiga-Iquiqe, buena parte dedicada al contrabando, parece explicar tal fenómeno.
En suma, la lectura histórica de los censos nos permite apreciar cómo determinadas tendencias están fuertemente ligadas a la economía, a la planificación estatal y a los ciclos que terminan igual que han comenzado.

El autor fue Presidente de la República
http://carlosdmesa.com/ 

lunes, 21 de enero de 2013

Humberto Vacaflor, gentil y solidario amplió nuestro conocimiento sobre Vinto y Huanuni. ahora nos damos cuenta de "la chambonada multimillonaria" de masistas en el poder. los chinos terminarán por embargar VINTO hoy al borde de la quiebra. Tack så mycket! (Gracias en sueco)

Vinto se hizo el jarkiri. De Siglo 21 N 1258

Vinto en peligro

Un contrato suscrito por algún error obliga a la fundición de Vinto a vender estaño metálico a la China pero bajo la modalidad CIF, es decir puesto en un puerto chino.

Jamás visto: Nunca, hasta ahora, ningún funcionario del Estado boliviano, y menos aun ejecutivos del sector privado pensaron siquiera en firmar un contrato de esas características.

CIF: Las iniciales CIF significan Cost, Insurance and Freight, que quiere decir que el vendedor debe pagar el embarque del bien en un barco, el costo del seguro del barco y el flete del transporte hasta el puerto de destino.

FOB: Por lo general, las operaciones de exportación se hacen en contratos FOB (free on board), con lo que el vendedor sólo paga el costo del embarque de la mercadería y el seguro, mientras que el comprador paga el flete hasta el puerto de destino.

Ninguna experiencia: A Vinto le resulta imposible cumplir con este contrato, porque hacerlo supondría contar con una gran experiencia e infraestructura logística, nos dijeron expertos en el ramo.

Voz de alarma: En diciembre pasado, el sindicato de trabajadores mineros de Huanuni dio a conocer una inesperada advertencia sobre la posibilidad de que la fundición de Vinto se declare en quiebra.

Ni las autoridades ni los medios masivos prestaron atención a esta denuncia. Los trabajadores de Huanuni dijeron que si Vinto entraba en quiebra podría poner en peligro a la propia mina, y a los 4.700 empleos.

Crece la ola: A pesar de la indiferencia de autoridades y prensa, el caso siguió creciendo. A principios de enero, José Pimentel, exministro de Minería, y ahora miembro del directorio de Comibol, dijo que Vinto estaba en peligro porque el Servicio de Impuestos Nacionales (SIN) no le devolvía los certificados de devolución de impuestos (CEDEIM) por US$ 75MM.

Se trata de certificados que reciben las empresas exportadoras y son libremente transferibles que pueden ser usados para el pago de obligaciones con el Estado.

Nada que ver: La autoridad del SIN, Roberto Ugarte, replicó al exministro Pimentel y dijo que según sus datos, el SIN no está demorado en la devolución de ese tipo de certificados a Vinto. Y que quizá Pimentel confundió dólares con bolivianos en su cálculo.

Eso sí, Ugarte descartó que el SIN pueda ser responsable de la situación delicada en que pueda encontrarse la fundición de estaño.

Dudas crecientes: Lo revelador es que Pimentel sostuvo que Vinto está en dificultades para pagar una deuda. El problema es que con los certificados que reclama al SIN no podría pagar a terceros, como por ejemplo a la empresa china que firmó aquel contrato feliz (para ella).

La voz de alarma de los trabajadores de Huanuni dijo que la situación de Vinto se debe a deficiencias administrativas. La COD de Oruro se sumó a estos pedidos de soluciones, pero nadie ha prestado atención al tema.

El problema es que los chinos están apretando.

sábado, 19 de enero de 2013

marathón. duró 24 horas cuando en Ginebra debatió la ONU sobre el mercurio. un acuerdo mundial para evitar los efectos perniciosos del mercurio sobre la salud y el medioambiente. un buen logro que valió la pena.


Tras cerca de 24 horas ininterrumpidas de reuniones en Ginebra, los agotados delegados aplaudieron poco antes de las 07.00 de esta mañana la adopción del nuevo tratado, el primero de carácter medioambiental y alcance mundial que se negocia en la ONU en los últimos diez años.
 Algunas de las cuestiones que más entramparon las negociaciones fueron el carácter obligatorio de las medidas que los países tendrán que tomar para reducir sus emisiones de mercurio a la atmósfera, la necesidad de atajar igualmente las emisiones al mar y ríos, así como la manera en que los países en desarrollo podrán financiar estas acciones.
 El mercurio es causante de graves problemas de salud y las actividades humanas que mayores emisiones generan son algunos procesos industriales y químicos, la generación de energía con carbón y la minería informal.
 El texto se selló con un contenido que estuvo por debajo de las expectativas que se había creado en torno a ella durante los más de cuatro años que requirió su negociación.
 Sus iniciadores buscaban un tratado enfocado en conseguir una reducción real de la liberación de mercurio en el medio ambiente, pero la necesidad de conciliar este objetivo con los distintos intereses económicos comprometidos provocó que su contenido final fuera menos ambicioso de lo esperado.
 El mercurio, una sustancia altamente tóxica que se encuentra en la naturaleza, ha sido incorporada en la última década a diversos procedimientos industriales, así como a numerosos productos que van desde termómetros hasta pilas y cremas blanqueadoras de la piel.
 Entre sus efectos sobre la salud figuran el daño permanente que puede ocasionar al cerebro y riñones y su capacidad de pasar al feto en formación, causando retardo mental o reduciendo el nivel de inteligencia del futuro niño.
 La convención se centra en las emisiones a la atmósfera -el mercurio se evapora y puede viajar a miles de kilómetros del lugar donde fue emitido-, pero deja a discreción de los países el control de las cantidades de mercurio que se liberan en mares y ríos.
 La exposición de los seres humanos al mercurio tiene lugar en gran medida a través del consumo de peces contaminados, un problema cuya gravedad ha sido quedado científicamente demostrada.
 Las principales fuentes de mercurio para el agua son las plantas que producen cloro-soda, de pulpa de papel y la minería artesanal de oro.
 Como un gran aporte de la convención, los negociadores presentaron un listado de productos con contenido de mercurio cuya producción, importación y exportación quedarán prohibidos en un plazo de cinco a diez años.
 Entre los productos con mercurio contemplados en ese listado están los termómetros, tensiómetros, pequeñas pilas (como las utilizadas en los relojes), pesticidas, entre otros.
 Las vacunas, que en la gran mayoría de países en desarrollo siguen conteniendo thiomersal -un compuesto de mercurio utilizado como preservante- quedaron excluidas del tratado.
 La convención será suscrita oficialmente por los gobiernos en octubre próximo en una conferencia internacional a celebrarse en Japón. 

viernes, 11 de enero de 2013

saber guardar las distancias...reclama Manfredo Kemppf. pensar en lo que vendrá y en que no toda ha cambiado a pesar de los mejores ingresos aunque nada sabe qué podría pasar cuando "todo cambie".


Por más que el Gobierno afirme que el nuevo Estado Plurinacional es absolutamente soberano, que ha cambiado la mentalidad derrotista del boliviano, que no somos peones de nadie, que queremos tener socios y no patrones, Bolivia, con algunos cambios no muy buenos, sigue siendo la misma de hace algunos años. Existen, hay que reconocer, muchas mayores reservas internacionales, más exportaciones, menor déficit fiscal, pero eso no se debe a que Bolivia produzca diez veces más que antes de la llegada de S.E. al poder. No responde a que estemos a la par con Chile y Perú en crecimiento, sino a que hemos sido favorecidos por excelentes precios, jamás vistos históricamente, en nuestras materias primas.
Lo de los precios en mercados internacionales, que tanto nos benefician, pueden cambiar de un día a otro, y entonces veremos que no se trata de que Bolivia se haya convertido en una “potencia emergente” y que, en siete años, hubiéramos crecido en producción. Nada de esto se puede equiparar a un milagro económico, como el ministro de Economía está listo a declarar. El “milagro boliviano” no existe, lamentablemente, porque fuera de los espléndidos precios de nuestras materias primas, se han cometido errores garrafales con la política de hidrocarburos y con la producción agrícola que ha sido restringida sin ninguna justificación.
Por lo tanto, no juguemos a potencia mayor. Ni siquiera podemos jugar a potencia menor comparados a nuestros vecinos. Mucho menos estemos tirando de la cuerda en nuestras relaciones con los EE.UU. porque no nos va a ir bien. Es cierto que tenemos todo el derecho se proclamarnos soberanos y que al pueblo le entusiasma ver cómo Bolivia puede poner en su sitio a los norteamericanos. Echar del país a un embajador gringo no es cosa de pobres diablos. Acusar a los yanquis de imperialistas en cuanta reunión acontece, causa cierta sensación de placer morboso, porque provocar al más grande, y que éste se achique, siempre halaga.
Pero hay que guardar las proporciones. Se debe andar con tiento. Es comprensible ilusionarse si el Estado Plurinacional ya se ha dado algunos gustos tirándole el guante a la cara a la primera potencia del mundo. Mas ahora sería mejor que las relaciones diplomáticas se normalicen con un intercambio de embajadores. Y si no queremos hacer el canje de embajadores, por lo menos llevemos una política prudente y coherente, si no la deseamos cordial.
Nada vamos a ganar hostilizando a los gringos, que no sea el aplauso de los chavistas, del ALBA, de Irán o Siria. Pero, ¿qué van a hacer esas naciones si de golpe se corta el montón de dinero que estamos derrochando hoy? ¿Qué sucedería si súbitamente se seca el chorro? ¿Si faltara plata hasta para el combustible del avión presidencial? Tal vez la primera factura a pagar vendría de Venezuela, porque se le debe mucho dinero. Y ni se diga lo que nos aguardaría si, como parece, Chávez, que es nuestro mecenas, pasara a mejor vida o no puede hacerse cargo de la presidencia.
No nos hagamos los matones de barrio si nos falta músculo. Si nos ponemos a investigar lo que ha hecho cada embajador norteamericano designado en Bolivia, no va a venir ninguno. Porque todos sus funcionarios profesionales han tenido que pasar por Pinochet, Castro, Videla, Gadafi, Somoza, Hussein, Kim Il-sung, o Chávez, posiblemente. Ya fueran secretarios o consejeros de embajada han tenido que hacer su carrera donde los enviara el Departamento de Estado y no donde ellos quisieran ir. Investigar el pasado de los candidatos a ocupar la embajada en La Paz, como si se tratara de delincuentes comunes, es cosa de risa. ¿Qué pasaría, por ejemplo, si EEUU investigara los antecedentes de todos los miembros el actual gobierno nacional? ¡Saltarían las alamas! ¡Vaya que habría cosas interesantes para enterarse!
Si se quiere encontrar pelos en la leche se los va a hallar. Expresa el Gobierno que los norteamericanos, en una oportunidad, violaron la soberanía nacional porque un grupo de investigadores estadounidenses estuvo en Chacaltaya y en Yungas, no para fines científicos, sino para saber cómo pelear mejor en la altura. Algo destinado a aplicar contra los afganos. ¡Pero qué disparate! ¿No lo podían hacer en Perú, Chile o Argentina también? Y el ministro de Gobierno dice que puede exhibir pruebas, mas como afirma siempre S.E., sin mostrarlas nunca.
Están proponiendo investigar nuevamente al “gringo” Ostreicher – según palabras de S.E. – cuando se pensaba que se lo iba a resarcir por los daños económicos y morales que se le habían ocasionado. Ostreicher, entonces, podría regresar nuevamente al penal de Palmasola, para que ahí lo acaben de rematar de una puñalada y se tapen todos los hechos de corrupción que tienen enloquecido e indignado a S.E.
Hagamos las paces con la gran potencia. No sigamos lo que nos dictan otros países ni trasnochados adivinos cósmicos, agoreros del fin del capitalismo. Finalmente, vamos a quedarnos solos, como quijotes en el silencio quieto de nuestro enorme territorio.

martes, 8 de enero de 2013

finalmente. el conflicto en las FFAA aflora, siempre ha existido aunque por la mano de hierro de cubanos y venezolanos que actúan en las decisiones internas nunca salió a los medios. ahora se quejan de discriminación


El Comando General del Ejército aprobó el ascenso de sólo 12 suboficiales maestres de 54 uniformados habilitados a este grado, a diferencia de lo sucedido en la Fuerza Aérea Boliviana (FAB) que promovió a 22 uniformados y en el caso de la Armada Boliviana a 19 suboficiales al grado de maestres. Por lo cual los afectados se quejaron de ser discriminados por el Alto Mando Militar.
Ante este panorama, el ex comandante General del Ejército y actual senador de Tarija, Marcelo Antezana Ruiz, lamentó la determinación asumida por el mando del Ejército y denunció discriminación contra los suboficiales de la promoción 82 de esta fuerza, quienes tras cumplir con una carrera de 30 años de servicio y los requisitos necesarios para optar al grado superior fueron marginados.
“A la vista está una clara discriminación de la administración del Ejército, se sobre entiende que la fuerza terrestre duplica en efectivos a las otras dos fuerzas militares y no puede ser posible que se asciendan a menos de la mitad de los suboficiales habilitados, pues porcentualmente los miembros del Ejército son más que la Fuerza Aérea y la Naval”, dijo el general al anunciar que en la petición de informe al ministro de Defensa, Rubén Saavedra y al Alto Mando se tratará la segregación de suboficiales.
“Lo lógico debía ser que ascienda el mismo número de suboficiales maestres en paridad, pero lo acertado y legal es que deben ser ascendido más suboficiales maestres en el Ejército, porque somos más. Además es coartar las aspiraciones después de 30 años de servicio a la institución castrense, estoy plenamente de acuerdo con la queja y denuncia interpuesta por los afectados”, manifestó Antezana, quien espera que esta situación sea revertida por el general Fernando Ceballos, actual comandante del Ejército.
MAS DENUNCIAS: Asimismo, un grupo de suboficiales de la promoción 82 del Ejército, que no quisieron identificarse por temor a represalias, denunció este martes que no sólo son víctimas de discriminación en el tema de los ascensos, también acusaron a los jefes militares de coartarles su derecho constitucional de estudiar en los institutos superiores del Ejército, como el caso de la Escuela Militar de Ingeniería (EMI) donde sólo se admite a oficiales y ciudadanos civiles, pero no así a personal subalterno.
Ante este panorama, el asambleísta Departamental del MAS, Roberto de la Cruz, anunció visitas sorpresa a las instalaciones del Ejército, Fuerza Aérea, Armada e institutos superiores militares, para comprobar la veracidad de las denuncias de discriminación y racismo contra los uniformados subalternos en pleno proceso de cambio, “más aún si los sargentos y suboficiales están prohibidos estudiar en la EMI”.
“Me han llegado una serie de denuncias de sargentos y suboficiales a mi despacho en la Asamblea Departamental, que van desde maltratos y abusos en las órdenes generales de destinos que no respetan la capacidad de los efectivos de bajo rango, hasta la existencia de ambientes exclusivos para comer y beber que son sólo de uso de jefes y oficiales. Si no se permite profesionalizarse en la Emi y los institutos superiores de las Fuerzas Armadas, entonces le han mentido al presidente, quien fue soldado, para mantener una estructura donde viven como gamonales los oficiales y jefes y como peones esclavizados los soldados, sargentos y suboficiales”, dijo.

sábado, 5 de enero de 2013

no se puede saber la verdad de lo que ocurre dentro de YPFB. El Deber se refiere al negocio de compara/venta/compra según denuncia de Carlos Miranda. lo tienen tapado al público sin conocerse a ciencia cierta lo que está pasando

Los altos precios del gas natural que Bolivia exporta están actuando como una cortina de humo que impide ver el verdadero estado en que se encuentra el sector petrolero en el país.

Y también impide saber cuál es la situación real de YPFB, pues sus utilidades parecen demasiado altas para el estado en que se encuentra su gestión.
Quizá una de las causas de esta situación sea que el presidente de YPFB sigue siendo un interino en lugar de ser elegido mediante un concurso de méritos por el parlamento, como manda la ley.
El señor Carlos Villegas, catedrático de la carrera de economía, maneja la empresa estatal del petróleo seguramente con mucha responsabilidad, pero se nota que no está en su rubro.

Las operaciones de venta/compra/venta de petróleo reconstituido, hecha por YPFB, merecieron críticas muy certeras y muy severas de parte del experto Carlos Miranda, exsuperintendente de Hidrocarburos. Vender un producto con descuento, luego comprar sus derivados en precios inflados para terminar reexportándolos a precios reducidos, es algo que merecería una investigación, además de figurar en los anales de los negocios inverosímiles. 
Los equipos industriales que se instalan en Río Grande y en el Chaco tienen demoras y sobreprecios inexplicables. Desde la cárcel donde se encuentra preso acusado de corrupción, el antecesor de Villegas, Santos Ramírez, dice que la planta de Río Grande duplicó su costo en tres años.

En la última semana de diciembre pasado, el señor Villegas dijo que la empresa que maneja tiene dificultades con las licencias ambientales y que incluso un trabajo de prospección sísmica está demorado durante dos años porque los pueblos originarios del Chaco no dan el visto bueno.

Con el antecedente del caso Tipnis, donde las consultas “previas” fueron hechas a posteriori y de prisa, parecía que el Gobierno había descubierto la forma de pasar por encima de las objeciones de los pueblos originarios a este tipo de obras.
Lo más objetable de la gestión petrolera es el hecho de que el consumo interno no merece el trato privilegiado y prioritario que ordena la Constitución.

Salvo que el parlamento opte por modificar el artículo 379 y de esa manera quede sin vigencia la disposición por la cual sólo se pueden exportar los excedentes, YPFB debería reducir las exportaciones para atender el mercado interno.
La política energética necesita ser reafirmada por el Gobierno, subrayando el hecho de que el consumo interno es considerado de prioridad absoluta.
Cumplir con lo que se ha ofrecido, hacer en la práctica lo que se ha dicho en palabras tendría que ser una obligación de los gobernantes.

jueves, 3 de enero de 2013

empresarios cruceños son los grandes animadores de la producción y la exportación no necesitan de invitación para participar de la bonanza...la generan (El Dia. SC)


Tal como lo hizo en septiembre del año pasado, el vicepresidente ha vuelto a pedirles a los empresarios bolivianos que acompañen el supuesto “boom económico” nacional, que no es otra cosa que el rebote que nos llega del éxito del capitalismo emergente en China, India o Brasil, donde las empresas privadas sí gozan de todas las garantías para invertir y generar riqueza, empleo e impuestos.

La declaración del segundo mandatario parece ser apenas un acto reflejo, una manera de dejar constancia en el discurso, que en Bolivia se respeta la iniciativa privada, aunque en los hechos esto sea una verdad a medias, al menos para los empresarios formales y legales, especialmente los que producen en el departamento de Santa Cruz, la región más castigada por la “persecución-extorsión” política y económica.

Algunos ejemplos sirven para poner en evidencia no sólo las preferencias odiosas, sino la inadmisible política abierta y descarada, destinada a perjudicar el desarrollo cruceño: los cañeros de Bermejo sí pueden exportar, pero los ingenios de Santa Cruz no; los contrabandistas de soya de Desaguadero tienen vía libre para sacar miles de toneladas de harina, pero los agricultores de las tierras bajas no; y de la misma manera sufren la hostilidad los que producen maíz, los ganaderos y otros agropecuarios que no tienen más remedio que aceptar el chantaje (oficial y paralelo) del régimen para poder sobrevivir.

Santa Cruz no ha dejado de crecer, es verdad, pero no al ritmo que debiera, en un contexto de excelentes precios internacionales de los productos agropecuarios, que a nombre del abastecimiento interno han sido duramente castigados, cuando la solución hubiera pasado por fomentar la expansión de tal manera de mantener abastecido el mercado nacional y generar saldos exportables mucho más grandes. Distinto ha sido el criterio aplicado a los hidrocarburos, que ha privilegiado el mercado externo a pesar de que existe una demanda insatisfecha dentro del país, hecho que también conspira contra el desarrollo de diversos sectores económicos. Todos estos embates contra el aparato productivo han hecho que otras regiones registren mejores indicadores, pese a que expresan el mismo dinamismo y diversificación.

Nadie en su sano juicio se quedaría de brazos cruzados frente al periodo de bonanza económica que vive toda América Latina y los empresarios de Santa Cruz no necesitan de una invitación especial para seguir produciendo. Lo han venido haciendo pese a todo, a los avasallamientos, a las prohibiciones, a los cupos y a los actos de extorsión de los que han sido víctimas... y hay que decirlo, pese a que lamentablemente no ha habido un adecuado acompañamiento de la dirigencia, cuyo entreguismo no ha sido nada favorable para nadie.

El Gobierno se ufana demasiado con unos resultados económicos que no le pertenecen. El régimen está fundamentado sobre una estructura productiva muy frágil que depende de los precios internacionales, que en el cualquier momento podrían darle un revés muy duro a la realidad nacional como ha sucedido demasiadas veces en nuestra historia. Descuidar el sector productivo, menospreciar las inversiones y tratar con tanto desdén a la locomotora del país es un riesgo que le costará muy caro al futuro de Bolivia.
"Santa Cruz no ha dejado de crecer, es verdad, pero no al ritmo que debiera, en un contexto de excelentes precios internacionales de los productos agropecuarios, que a nombre del abastecimiento interno han sido duramente castigados, cuando la solución hubiera pasado por fomentar la expansión de tal manera de mantener abastecido el mercado nacional y generar saldos exportables mucho más grandes.