El exsubcomandante de la Policía, coronel Oscar Muñoz Colodro, reveló que ocho horas antes del operativo de represión contra indígenas que defendían el TIPNIS, el chofer del entonces ministro de Gobierno, Sacha Llorenti, entregó alrededor de 30 mil bolivianos para financiar los gastos de esa acción.
La confesión de la exautoridad policial se encuentra transcrita en el acta de declaración ampliatoria que brindó el 25 de febrero pasado en su calidad de imputado, ante la comisión de fiscales de materia e investigadores de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen.
El exsubcomandante de la Policía, coronel Oscar Muñoz Colodro, reveló que ocho horas antes del operativo de represión contra indígenas que defendían el TIPNIS, el chofer del entonces ministro de Gobierno, Sacha Llorenti, entregó alrededor de 30 mil bolivianos para financiar los gastos de esa acción.
La confesión de la exautoridad policial se encuentra transcrita en el acta de declaración ampliatoria que brindó el 25 de febrero pasado en su calidad de imputado, ante la comisión de fiscales de materia e investigadores de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen.
Este dato añadido a la actividad que cumplió la funcionaria de esa entidad pública, Carolina Vertiz, contratando los buses que trasladarían a los marchistas desde Chaparina, explican el trabajo logístico que se sustanció para el efecto.
“Es de su conocimiento que se hace presente el chofer del Ministro (Sacha Llorenti), con algo de Bs. 30.000 para cubrir todos aquellos gastos que se presenten en aquellos acontecimientos, que también están reflejados en los informes que cursan en el cuaderno de investigaciones”, señala.
Muñoz –en el documento- también identifica acciones de logística el día del operativo y que dejó un saldo de indígenas maltratados.
“Así también es de su conocimiento del (ex viceministro de Gobierno) señor Marcos Farfán que al retornar la caravana de la localidad de San Borja compra combustible y cinco funcionarios del Ministerio de Gobierno se suben a esos buses con destino a Rurrenabaque”, agrega.
Buses contratados
El ex subcomandante general de la Policía señaló a Carolina Vertiz de haber procedido con la contratación de las flotas para obligar a los indígenas que se trasladen a sus lugares de origen.
El representante policial no da mayores detalles sobre esa tarea y tampoco de la compra de cintas masquin que se utilizó para amordazar a los movilizados.
“Pasados unos minutos, ya la voz de activarse el operativo llegan las camionetas, casi simultáneamente llega una vagoneta oscura con vidrios raybanizados que se estaciona unos 50 metros delante de la que yo me encontraba…ese es el momento en que se procede la evacuación (entiéndase represión) de los indígenas a los buses que habían sido llevados para dicho fin contratados por Carolina Vertiz y ese es el momento en que vienen las camionetas que se tenían disponibles en la zona, juntamente con las siete camionetas con sus respectivos conductores dispuestos por la Fuerza de Tarea Conjunta”, agrega.
Este dato añadido a la actividad que cumplió la funcionaria de esa entidad pública, Carolina Vertiz, contratando los buses que trasladarían a los marchistas desde Chaparina, explican el trabajo logístico que se sustanció para el efecto.
“Es de su conocimiento que se hace presente el chofer del Ministro (Sacha Llorenti), con algo de Bs. 30.000 para cubrir todos aquellos gastos que se presenten en aquellos acontecimientos, que también están reflejados en los informes que cursan en el cuaderno de investigaciones”, señala.
Muñoz –en el documento- también identifica acciones de logística el día del operativo y que dejó un saldo de indígenas maltratados.
“Así también es de su conocimiento del (ex viceministro de Gobierno) señor Marcos Farfán que al retornar la caravana de la localidad de San Borja compra combustible y cinco funcionarios del Ministerio de Gobierno se suben a esos buses con destino a Rurrenabaque”, agrega.
Buses contratados
El ex subcomandante general de la Policía señaló a Carolina Vertiz de haber procedido con la contratación de las flotas para obligar a los indígenas que se trasladen a sus lugares de origen.
El representante policial no da mayores detalles sobre esa tarea y tampoco de la compra de cintas masquin que se utilizó para amordazar a los movilizados.
“Pasados unos minutos, ya la voz de activarse el operativo llegan las camionetas, casi simultáneamente llega una vagoneta oscura con vidrios raybanizados que se estaciona unos 50 metros delante de la que yo me encontraba…ese es el momento en que se procede la evacuación (entiéndase represión) de los indígenas a los buses que habían sido llevados para dicho fin contratados por Carolina Vertiz y ese es el momento en que vienen las camionetas que se tenían disponibles en la zona, juntamente con las siete camionetas con sus respectivos conductores dispuestos por la Fuerza de Tarea Conjunta”, agrega.