Al enviar su proyecto de referéndum por constitución al congreso, Evo Morales no está dando un paso atrás sino dos adelante y esto plantea una alerta a la resistencia civil de la Media Luna que no está hoy en condiciones de dar ni medio paso atrás, porque hacerlo le significaría firmar su certificado de defunción.
Es improbable que Evo haya acudido al Congreso para que arbitre la aprobación del referéndum combo, sin que antes no hubieran apalabrado acuerdos previos para encaminar su proyecto de constitución hacia una aprobación segura e impajaritable.
Morales, no es ningún inexperto como para arriesgarlo todo sin antes haber cerrado importantes operaciones de concertación con los padres opositores de la patria. Sabemos que Evo se las está jugando todas y también sabemos que la oposición podemasista es funcional y complaciente, tenemos muchas pruebas de ello, entre otras el alargue de la Asamblea y la aprobación del referéndum revocatorio que significó el ablandamiento del proyecto de la media luna, para entrar luego a esta segunda etapa de negociación que le dará una nueva manito al proyecto de constitución del MAS.
Los campanazos de alertas nos han llegado a través de declaraciones que plantean que se está por dar curso a una concertación. Por supuesto que en aras de esta concertación, que no es confiable por los antecedentes, se habla de que el camino es el gran acuerdo nacional, como si no supiéramos que los que quieren hacer el acuerdo nunca han dado un sólo paso en contra de los intereses del masismo y que lo único que realmente han hecho ha sido ir entregando al pueblo para que el MAS haga lo que se le ocurre con el país.
La segundita ya estaba en agenda del "podemasismo", aunque por alguna razón el MAS pretendió pasar su reférendum por tiro libre o por decreto, tratando de dejar con los crespos hechos a los maquilladores, quienes ya habían comenzado incluso a decir que la constitución del MAS es buena, salvo por algunos pequeños detalles que ya estaban siendo limpiados por sus esteticistas.
Al mismo tiempo que Evo anunció que ponía su proyecto en manos de los congresistas, dos importantes miembros de Podemos participaron de un programa de televisión para anunciarnos que llegó el momento de la segundita, o la etapa de la concertación del proyecto del MAS que será la que definitivamente le dé curso.
Por supuesto que esta vez se hará con los prefectos para que haya una concertación con las regiones, lo que tampoco significa una garantía, primero porque los prefectos no son quienes tienen que decidir los temas constitucionales y porque aunque son actores políticos válidos, no son infalibles y tanto es así que incluso aceptaron ir al revocatorio, consulta que dio como resultado que nuestros departamentos perdieran aunque ellos hubieran ganado en este desigual match.
Tenemos que seguir analizando este hecho porque indudablemente ha sido el punto de partido para el tremendo despelote en el que nos encontramos, pues no es poca cosa regalarle un match al contendor y otorgarle incluso el premio de un puntaje que le dio el título de campeón, así sea sobre el fraude que se haya cometido. Prueba de ello, es que el fraude ya ni siquiera se menciona, salvo por el eco de algunas voces de los que no estuvieron implicados en la concertación del revocatorio.
Pero ahora, llegó la segundita, que por supuesto vuelve a poner la pelota en la cancha del congreso y estos le darán un papel a los prefectos para seguir tejiendo la tela con las agujas podemasistas, que por supuesto tiene más socios y operadores que los que figuran en la lista oficial de congresistas.
¿Ustedes creen por acaso que Evo Morales y su partido aceptará que le quiten el espíritu hegemónico, racista y comunista a su constitución? Por supuesto que no lo hará, y es más no aceptará que le quiten ni una coma de su esencia, aunque por supuesto que va a aprobar que le pongan un poco de macke up, algo de chapas y quizás hasta un lápiz labial para que parezca más seductora y atractiva a fin de engatusar a la gente.
Los cirujanos reconstructores de esta lipoaspiración y de esta cirugía de senos, nariz y ojos que le están realizando al texto abortado en Oruro, ya empezaron a vendernos su proyecto planteando que el monstruo se puede volver presentable y hasta atractivo en la medida que confiemos en sus expertos bisturís.
Los trabajitos anteriores que han realizado antes de esta gran obra maestra que están en camino de practicar son una muestra de todo lo contrario. Sólo para recordar algunos de estos trabajos tenemos la pregunta del referéndum por autonomías que a último momento fue cambiada atendiendo a una concertación con el experto vicepresidente García Linera, razón por la cual la pregunta nos negó la posibilidad de que los departamentos tuvieran en sus manos la asignación de sus competencias y recursos, dejando a la autonomía como una simple descentralización administrativa en dependencia absoluta del gobierno.
Por todas estas razones y por la importancia de lo que está en juego, consideramos que un texto constitucional que pretende cambiar radicalmente al país debe ser tratado con la responsabilidad que se merece, razón por la que no puede ser fruto de una segunda negociación, ni puede estar en manos de un congreso que ha dado muestras no sólo de ineficiencia sino también de actitudes interesadas, que obedecen a negociaciaciones que no se inscriben en el plano del interés de la República ni del bien común sino en otro tipo de apuestas.
El texto constitucional debe pasar por otra Asamblea Constituyente que tenga control social y que sea transparente. Evidentemente se debe dar curso a un cambio, pero no se debe seguir engañando al pueblo a nombre del cambio.
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