Bolivia: 3 MUJERES, 30 DÍAS DE HUELGA DE HAMBRE Y NADA DE EVO
La huelga ha debilitado sus cuerpos, pero eso no parece importarles mucho a estas mujeres agigantadas por el sacrificio y que van ganando la batalla moral contra quienes encubren y protegen a los grupos militares que asolaron Bolivia en los años 60 y 80
Redacción de Econoticiasbolivia.com
La Paz, junio 3, 2009).- Sin dar ni pedir tregua, tres mujeres cumplen hoy 30 días en huelga de hambre para hallar a los desaparecidos por las dictaduras militares y para que la impunidad no siga campeando en Bolivia.
“Nos encontramos en huelga de hambre pidiendo su atención para que ordene a las Fuerzas Armadas que devuelvan los restos de nuestros familiares desaparecidos y sus pertenencias que se encuentran bajo jurisdicción militar y la desclasificación de los archivos del Estado Mayor”, le habían escrito con firmeza y dolor las tres huelguistas al presidente de Bolivia, Evo Morales.
“Nos resulta muy difícil de comprender por qué no atiende nuestro clamoroso pedido, que además es completamente justo, legal y humanitario”, señalaba la misiva enviada hace una semana y que hasta hoy no encuentra respuesta.
Por eso, Marta Montiel, Olga Flores Bedregal y Hortensia Gutiérrez de Flores, las tres mujeres que ayunan hace un mes para abrir los siniestros archivos militares, siguen en la batalla, a pesar de estar ajadas por los años y el sufrimiento.
La huelga ha debilitado sus cuerpos, pero eso no parece importarles mucho a estas mujeres agigantadas por el sacrificio y que van ganando la batalla moral contra quienes encubren y protegen a los grupos militares que asolaron Bolivia en los años 60 y 80.
“Nuestros familiares fueron víctimas de la más siniestra práctica represiva cual es la desaparición forzada de personas, que consiste en la conculcación de todos los derechos de la persona, pues fueron capturados, detenidos de una manera brutal sin orden judicial ninguna, conducidos a cárceles clandestinas, donde estuvieron incomunicados, torturados, se les negó su identidad y paradero y finalmente fueron ejecutados, pero como si esto no fuera suficiente los militares (tal vez no todos fueron militares por eso queremos que se abran los archivos) secuestraron sus cuerpos, los descuartizaron en algunos casos, los enterraron clandestinamente, en otros presumimos los echaron al lago Titicaca”.
INTERPELACIÓN Y SHOW
Interpelados por la huelga de hambre de las tres mujeres, el gobierno de Evo Morales, por boca de su viceministro Sacha Llorenti, había anunciado que este martes se comenzaría a revisar y abrir los “archivos clasificados” de las Fuerzas Armadas en el Estado Mayor, que semanas atrás, paradójicamente, los jefes militares y el propio Morales habían declarado como “inexistentes”.
Como estaba prevista la reunión se cumplió este martes con la presencia del Alto Mando Militar, Ministros de Estado y los grupos de Derechos Humanos, pero los “archivos clasificados” no aparecieron por ninguna parte, por lo que los funcionarios reunidos en el Estado Mayor del Ejército acordaron crear una “comisión” para planificar la búsqueda de al menos 156 personas desaparecidas durante periodos dictatoriales.
"Estamos en una fase de acercamiento con las Fuerzas Armadas, porque existió tanta suspicacia, temores, prejuicios y visiones distintas, pero hoy lo importante es que hemos formado una comisión que tiene varios desafíos", dijo el Presidente de la Asamblea Permanente de Derechos Humanos de Bolivia (APDHB), Rolando Villena.
Dando por cierta la versión de los jefes militares de que no existen “archivos clasificados” bajo su directo control, la comisión aventuró la posibilidad de encontrar estos documentos en las dependencias de la Vicepresidencia de la República, en el Banco Central de Bolivia y en los ministerios de Relaciones Exteriores y de Defensa.
“Se habló de que en estos lugares podría haber alguna información”, detalló una fuente militar al matutino La Razón.
Así, sin ninguna certeza y armada sólo con indicios, la comisión, según Villena, intentará ubicar los “archivos clasificados”, para así dar cumplimiento a la Resolución Ministerial 0316 que, según el Gobierno, abre los archivos de las dictaduras a las víctimas y familiares de los desaparecidos en las dictaduras, pero que a las huelguistas les sabe a una nueva y cruel burla.
CUESTIÓN DE MORAL
“La Resolución Ministerial 0316 (19-5-09) emitida por el Ministro de Defensa, resulta ser un insuficiente instrumento legal para cumplir nuestro cometido. Argumentar que no es necesario desclasificar porque no hay los archivos constituye una argucia que encubre un delito, pues un archivo no puede ser dañado ni sustraído por persona alguna y en caso de comprobarse esta falta deberá procederse como manda la ley”, cuestiona el trío de mujeres en huelga.
Por ahora, el ayuno de 30 días no parece haber hecho mella en el ánimo del presidente Morales y los suyos, a pesar de la interpelación directa al gobernante. “Usted no puede dejar que estos crímenes permanezcan en la impunidad, ni prolongar nuestro sufrimiento de por vida, ya que, vivimos un duelo permanente pues no podemos dejar de pensar en ellos, abandonarlos sería para nosotras, aceptar que triunfe la iniquidad”.
“Somos mujeres que amamos la vida, y aunque parezca incoherente estamos dispuestas a morir por lo que creemos justo, si este es el precio que tenemos que pagar, estamos dispuestas a hacerlo, con eso al menos habremos contribuido a restablecer una ética de principios en la política boliviana acabando así con un doble discurso”, han dicho Marta Montiel, Olga Flores Bedregal y Hortensia Gutiérrez de Flores, tres mujeres que, autoinmolándose de a poco, escriben una nueva y bella página en la historia boliviana para alcanzar la justicia y el fin de la impunidad y la hipocresía.