Para los días sábado, domingo, lunes y martes se han preparado sendas celebraciones en Vallegrande, La Higuera y aún Santa Cruz en recuerdo de los 40 años de la muerte del Ché, a manos de Mario Terán el entonces alcoholizado sargento del regimiento que detuvo al Che y cuyos jefes inmediatos que habían recibido la orden de liquidar al guerrillero, en lugar de organizar un pelotón y llevarlo al fusilamiento, emborracharon al soldado y éste munido de una metralleta ingresó a la estrecha habitación (una aula de la escuelita rural) donde le dió muerte. Mario Terán por una de esas ironías del destino, acaba de ser operado de la vista (cataratas) por un equipo de médicos que provienen justamente de Cuba, la patria que el Che adoptó como suya para realizar la Revolución. Miles de visitantes argentinos, cubanos, brasileños y de muchos otros países recorrerán la llamada "ruta del Ché" en caravanas de motocicletas, vehículos ligeros, buses y camiones. En el recorrido se han programado actos culturales, exposiciones, presentación de libros, marchas de a pie, prácticas deportivas y hasta un festival de la canción denominada Benjo Cruz, en recuerdo del guerrillero cantor que murió en las jornadas de Teoponte. El martes culminará el programa con un acto político religioso donde se preveé participarán políticos de renombre.
Se han organizado comités especiales de la Fundación que preside el médico Oswaldo Peredo, cuyos hermanos "Inti" y "Chato", combatieron junto al cubano-argentino y sucumbieron a las balas de la represión político-militar de la posguerrilla.
Militares que combatieron al Che
Han estado gestionando el reconocimiento del gobierno en nombre de 55 combatientes que habrían muerto entre el 23 de marzo y el 8 de octubre de 1967 que duró la gesta guerrillera. Para los militares que reclaman el tratamiento de héroes de Ñanchaguazú por la zona donde tuvo lugar la acción armada. Se produce entonces una controversia, puesto que mientras el Gobierno de Evo Morales preside, alienta y participa en las celebraciones de que nos ocupamos, la Confederación de Excombatientes reclama moderación y reconocimiento, según el general Juan Carlos Monje coordinador de los jefes, oficiales y soldados que se opusieron a la guerrilla.
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