Las empresas chilenas aprovecharon el agua del Silala desde 1908 sin pagar un peso, y pasado un siglo Chile aceptó compensar a Bolivia, inicialmente, por el 50 por ciento del caudal que atraviesa la frontera. El pueblo boliviano dirá si acepta o no la oferta y decidirá si el pre acuerdo le conviene o no al país, planteó el Presidente Evo Morales.
Después de 101 años de desencuentros diplomáticos, los gobiernos de Bolivia y Chile acordaron estudiar las características del sistema hídrico del Silala durante cuatro años con el fin de establecer científicamente si se trata de un manantial de propiedad absoluta del Estado boliviano o si es un río internacional compartido con el Estado chileno.
Entre tanto, ambos países compartirán las aguas en partes iguales. Bolivia recibirá como compensación al menos 3 millones de dólares anuales por el 50 por ciento del agua de libre disponibilidad que le corresponde.
El preacuerdo con Chile no es definitivo y todavía debe ser socializado y debatido con el pueblo boliviano, aclaró el Presidente Morales.
El canciller David Choquehuanca ha iniciado la socialización del acuerdo entre los sectores sociales representativos del país y debe brindar un informe detallado a la Cámara de Senadores el martes de la próxima semana. El vicepresidente Alvaro García Linera recibirá a los dirigentes cívicos de Potosí el lunes para analizar el preacuerdo.
Según Morales, el dilema está planteado: O el pueblo de "Bolivia permite que Chile siga aprovechándose del Silala o se deja algún beneficio para la nación propietaria de las aguas. (...) Si los ciudadanos dicen no, entonces seguiremos perdiendo (y) el agua va a seguir yéndose porque es difícil volcarla al lado boliviano; si aceptan hay que mejorar esas propuestas en cuatro años".
El Presidente pidió al pueblo que escuche y medite sobre lo que más le conviene al país, y decida si quiere o no quiere beneficios para Bolivia.
El gobierno boliviano recalcó que no renuncia a una compensación por las aguas del Silala aprovechadas por empresas chilenas durante más de un siglo. El acuerdo inicial deja abierta la discusión de la deuda histórica en los próximos cuatro años.
"Que Chile compense, 100 años se llevaron agua boliviana gratuitamente sin dejar ningún beneficio", reclamó Morales.
La Central Obrera Regional (COR) de El Alto, la Cámara del Transporte Pesado de esa ciudad, la Federación de juntas Vecinales (FEJUVE) y ex dirigentes vecinales alteños criticaron al gobierno por "regalar" a Chile el 50% del Silala y exigieron industrializar las aguas.
La representante de la Cámara del Transporte Pesado Layda Nuñez del Prado acusó al vicecanciller Hugo Fernández de traición a la patria por "poner en duda la soberanía de las aguas del Silala y permitir el pago del 50%, después de que Chile usurpó por cien años esas aguas".
El ex dirigente vecinal Javier Limachi propuso construir represas para generar energía hidroeléctrica, y sistemas de riego para la producción de ganado auquénido. "Si al final no quieren hay que echar raticida o veneno a esas aguas", dijo.
Evo Morales reveló que se ha pensado instalar en la zona una embotelladora de agua, propuesta que debe ser analizada en el Congreso para luego aprobar una Ley.
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